El sistema electoral peruano se encuentra en un momento crucial, marcado por cambios normativos, tensiones políticas y la necesidad urgente de recuperar la confianza ciudadana. En este contexto, el presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Roberto Burneo Bermejo, ha alzado su voz para expresar sus preocupaciones y los retos que enfrenta la institución de cara a las próximas elecciones generales de 2026 y a los comicios regionales y municipales del año siguiente. En este artículo, analizaremos los puntos clave de sus declaraciones, abordando las críticas al Congreso, la necesidad de presupuesto y los esfuerzos por garantizar la transparencia y la legitimidad del proceso electoral.
El JNE Bajo Fuego: Críticas y Cambios Normativos
El presidente del JNE, Roberto Burneo, no ha dudado en expresar su preocupación por la reciente norma aprobada por el Congreso que recorta su mandato. Califica la medida como «antitécnica», argumentando que el modelo actual, con un representante del Poder Judicial al frente del organismo, ha funcionado durante décadas y garantiza la imparcialidad y la experiencia necesarias para liderar el sistema electoral.
Burneo también ha mostrado su inquietud por la iniciativa parlamentaria que busca conservar las cédulas de votación durante 90 días, advirtiendo que esta medida podría generar cuestionamientos a autoridades electas y afectar el calendario electoral. Estas críticas reflejan una creciente tensión entre el JNE y el Congreso, que parece buscar una mayor injerencia en el sistema electoral.
La Búsqueda de Confianza: Un Reto Urgente
Burneo reconoce que la credibilidad del JNE se ha visto afectada por los cuestionamientos surgidos a partir del proceso electoral de 2021. Reconoce que la falta de confianza en el sistema electoral es un desafío que su gestión se ha propuesto superar. Subraya el compromiso de su equipo para garantizar la transparencia y la voluntad popular en cada proceso electoral.
El presidente del JNE destaca que es fundamental que la ciudadanía confíe en las instituciones electorales y que su voto sea respetado. Su administración está trabajando arduamente para que cada elección sea un ejemplo de transparencia y legitimidad, con el fin de que los ciudadanos confíen en que su participación es determinante para el futuro del país.
El Presupuesto: Un Obstáculo para la Operatividad
La falta de financiamiento es otra preocupación expresada por Burneo. A pesar de que ya ha presentado un presupuesto detallado y optimizado para los procesos electorales de 2025 y 2026 (alrededor de S/958 millones solo para el 2025), el JNE aún no ha recibido ningún desembolso por parte del Gobierno. El recorte del presupuesto operativo anual del JNE por parte del Congreso también genera inquietud, ya que esto afecta directamente la capacidad del organismo para llevar a cabo sus funciones.
El presidente del JNE enfatiza la importancia de que el Poder Ejecutivo comprenda la magnitud del reto electoral que se avecina, con una gran cantidad de partidos y candidatos involucrados, y que se garantice el financiamiento necesario para que los procesos electorales se puedan desarrollar de manera óptima y sin contratiempos.
Desafíos Operativos: La Complejidad de las Elecciones 2026
Las elecciones generales de 2026 se presentan como un desafío sin precedentes debido a la gran cantidad de partidos políticos inscritos (actualmente 39 y posiblemente 40), con un estimado de 12.000 a 13.000 candidatos para las elecciones generales, y más de medio millón para los comicios regionales y municipales.
La complejidad de la logística y la cantidad de actores involucrados representan un reto para la capacidad del JNE para garantizar procesos electorales limpios y transparentes. El presidente destaca que se está fortaleciendo la gestión, invirtiendo en tecnología y mejorando las condiciones laborales de los trabajadores para hacer frente a la «tormenta perfecta» electoral de los próximos años.
El Sistema de Control y las Decisiones del JNE:
Burneo ha sido enfático en la necesidad de que las resoluciones del pleno del JNE sean vinculantes para todos los jurados electorales especiales, con el fin de evitar dispersión de criterios y garantizar la uniformidad en la aplicación de la ley. Además, ha destacado la importancia de que los jueces tengan independencia al momento de tomar decisiones, e indica que los juicios políticos no deben afectar la independencia de las decisiones del JNE.
Sobre la cancelación de un partido en específico, indica que respetarán la decisión de la corte suprema y garantizarán el debido proceso en todo momento.
Nuevas Iniciativas:
Entre las iniciativas impulsadas por el JNE, se encuentra la necesidad de que los fallos del JNE sean obligatorios y la propuesta de ampliar el plazo de convocatoria para las elecciones regionales y municipales a 365 días, para garantizar que se realicen las primarias dentro de los partidos.
Recuerda:
El sistema electoral peruano enfrenta una serie de retos que ponen a prueba su capacidad para garantizar la democracia y la legitimidad de los procesos electorales. La gestión de Roberto Burneo en el JNE se enfrenta a desafíos como la desconfianza ciudadana, la falta de presupuesto y la incertidumbre provocada por las iniciativas del Congreso. Sin embargo, su administración se muestra comprometida a trabajar por la transparencia, la eficiencia y la equidad de cada elección, buscando recuperar la confianza de los ciudadanos en el sistema electoral. La clave del éxito estará en la capacidad del JNE para adaptarse a los cambios, colaborar con las diferentes fuerzas políticas y mantener el principio de la voluntad popular como su principal objetivo.
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